domingo, 23 de junio de 2013
miércoles, 19 de junio de 2013
BRUCELLA CANIS
Brucella canis es un cocobacilo gram-negativo que causa la
forma de la brucelosis canina. Al igual que otras bacterias del género Brucella
, que causa una enfermedad infecciosa llamada brucelosis, específicamente en
los caninos. A pesar de que puede ser transmitida a los seres humanos, sus
efectos no son tan graves como los que aparecen en los perros.
Estas bacterias sólo pueden entrar en un host a través de
una membrana mucosa, como los ojos, la nariz, los genitales o en la boca.
Después de penetrar la membrana, las bacterias continúan adjuntar y fagocitosis
continúa, el aumento de las posibilidades de la brucelosis. A continuación,
viajan a los ganglios linfáticos, se reproducen, y se dirigen al tejido
reproductivo, lo que resulta en un período de incubación total de
aproximadamente dos a tres semanas. A pesar de que puede sobrevivir fuera del
tejido vivo si la humedad es alta, la temperatura es baja, y hay poca luz
solar, el crecimiento de B. canis está prohibido en las concentraciones de CO2
de más de 10%.
brucelosis, como se ve en perros, causa muchos problemas
reproductivos. En las mujeres, provoca aborto automática aproximadamente dos
semanas antes del nacimiento, flujo vaginal durante las semanas después de un
aborto, o la incapacidad de concebir en absoluto. Los cachorros que sobreviven
a través del nacimiento pueden desarrollar la brucelosis en el futuro. En los
hombres, los síntomas incluyen la reducción de la viabilidad de los
espermatozoides, atrofia testiculars, infertilidad o problemas dermatológicos
del escroto. En ambos sexos, esta enfermedad puede causar letargo y
agrandamiento de los ganglios linfáticos, e incluso se puede diseminar a través
del torrente sanguíneo causando problemas en las articulaciones o los huesos,
si la infección es grave.
Aunque se creía que ser exclusivamente de transmisión
sexual, ahora se sabe que puede ser transmitida de otras maneras, incluyendo:
el feto, la placenta, cualquier descarga vaginal (después de un aborto o
durante el ciclo de calor), el semen, la leche o la orina. También se puede
encontrar en las concentraciones más pequeñas en la saliva y otras secreciones,
y en las heces. Considerando los muchos métodos de transmisión, los perros son
más susceptibles a la infección si se crían o viven en lugares cerrados con
otros perros, como en una perrera.
Los síntomas de Brucella canis en personas incluyen el
agrandamiento de ganglios linfáticos, fiebre, dolor de cabeza, debilidad y
hueso, válvulas cardíacas o problemas en las articulaciones. Los seres humanos
experimentan un mayor riesgo de infección si se trabaja con perros de manera
frecuente y regular, como las del sector veterinario o criadores. Esta bacteria
se transmite a los humanos a través de la descarga reproductiva, cachorros
abortados, la orina, el polvo o la suciedad, pero la infección ocurre
generalmente cuando una de estas cosas contactos rompen la piel o se ingiere.
Aunque la brucelosis causada por B. canis es zoonótica, sólo se han descrito 30
casos en humanos desde 1960.
Prueba anual de esta bacteria se sugiere para la cría de
perros para evitar la propagación, así como para aquellos que ya tienen las
abejas. Hay varias pruebas que se usan para el diagnóstico. Un examen de prueba
de aglutinación (RSAT) pruebas de suero de sangre rápido de las bacterias
gram-negativas utilizando Brucella ovis antígenos. Un resultado positivo no
significa que el paciente tiene B. canis , ya que otras bacterias
gram-negativas puede reaccionar también. Si se observa un resultado positivo,
una prueba de aglutinación en tubo (TAT) se ejecuta para poner a prueba
específicamente para B. canis por el suero diluido con mezcla B. canis
antígeno.
El tratamiento de la brucelosis canina incluye antibióticos
para humanos. Para los perros, un régimen de antibióticos es sólo el comienzo.
Los perros infectados deben ser aislados para evitar la propagación de las
bacterias, e incluso con antibióticos, la recaída es común ya que las bacterias
crecen intracelularmente. Mientras que la esterilización y castración puede
reducir el riesgo de transmisión, la eutanasia es la única manera de eliminar
las bacterias. Se sugiere para continuar con las pruebas de antígenos después
del tratamiento si no se lleva a cabo la eutanasia. Con el fin de desinfectar
las áreas contaminadas, muchos productos comunes son eficaces, incluyendo
lejía, etanol al 70% y yodo.
Brucella canis es un peligroso y contagioso bacterias a los
perros, y aunque puede presentar síntomas graves en las personas, no es
probable que infectan a los humanos. Debido a su morada intracelular, que no
puede ser fácilmente asesinados, por lo que una recaída de la brucelosis es común,
y la prueba debe hacerse con regularidad, incluso después del tratamiento.
sigerido por: John Jaime Quimbaya Ramirez
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